Este 10 de noviembre arrancaba, bajo el lema “Identidad, vitalidad, transformación. Juntos lo hacemos posible”, la III Asamblea Internacional de la Misión Educativa Lasaliana (AIMEL), una cita indispensable que llega con retraso por la pandemia. La bienvenida corría a cargo del El Hermano Superior General, Robert Schiller.
La AIMEL 2020 es el foro en el que se darán los primeros pasos para poner las bases de la reflexión que durante los próximos meses se hará. A él han acudido más de 100 delegados y delegadas de todas partes del mundo en representación de cerca de 3.500 Hermanos, más de 100.000 educadores de más de 1.000 escuelas en 79 países a las que asisten más de 1.000.000 de alumnos.
El objetivo es, desde el compromiso, analizar y reflexionar sobre las diferentes propuestas educativas que se pondrán sobre la mesa y que presentan las distintas regiones y distritos. En ellas, la tecnología se presenta como la gran aliada.
Las propuestas que salgan adelante tras estos meses de trabajo se propondrán en el 46 Capítulo General con el fin de ser aprobadas. En el mes de noviembre del año próximo, serán desarrolladas en la Casa Generalicia, en Roma, por los delegados designados para esta AIMEL 2020. Así se fortalece el compromiso asociativo y se podrá, sin duda, vislumbrar un futuro lleno de esperanza.
La Salle, como institución, renueva los cimientos sobre los que se sostiene su misión, y se anima a caminar todos juntos, para ayudar a los niños y jóvenes que más lo necesitan y, desde la unidad y la riqueza de la diversidad, construir un mundo mejor.