Después de clase, nuestros alumnos disfrutaron de una maravillosa excursión a Belvedere House, en el encantador pueblo de Mullingar. Un corto viaje en guagua nos llevó a un lugar de ensueño: castillos, jardines de hadas, un lago brillante y paisajes verdes que parecían no tener fin. El buen tiempo nos acompañó y convirtió la tarde en una experiencia mágica.
After class, our students enjoyed a wonderful trip to Belvedere House in the charming village of Mullingar. A short bus ride took us to a dreamy destination: castles, fairy gardens, a shimmering lake, and endless green landscapes. The beautiful weather made the afternoon feel truly magical.